Hay quienes no se deciden a acudir a la consulta de un psicólogo por los diferentes estereotipos que a día de hoy todavía existen sobre pedir ayuda: unos creen que es un signo de debilidad, otros que es para gente con problemas psicológicos muy serios, otros tienen miedo al qué dirán, otros creen que no sirve, otros por desconocimiento de a qué van enfrentarse y a cómo es eso de ir al psicólogo…
En fin, podríamos seguir enumerando motivos, pero mejor empezamos a aclarar dudas.
¿Para qué ir al psicólogo?
Ir al psicólogo es un acto de responsabilidad con el propio bienestar mental y emocional, y si decides ir es para que este profesional te ayude, te oriente y te aporte un punto de vista diferente sobre la situación que atraviesas, con el objetivo de disminuir el malestar que sientas.
Afortunadamente a la salud mental cada vez se le da más importancia, y la sociedad y los gobiernos empiezan a ser conscientes de ello - recientemente en nuestro país se ha aprobado el Plan de Acción de Salud Mental 2022-.
Algunas razones por las que ir al psicólogo
A continuación, encontrarás algunos motivos de porqué buscar ayuda psicológica:
- Adquirir herramientas que te permitan el desarrollo personal.
- Autoconocimiento (por ejemplo, hay personas cuya orientación es la asexualidad y por desconocimiento creen que tienen problemas o un trastorno).
- Aceptar quién eres, con tu parte buena, pero también con tu lado más oscuro.
- Identificar reacciones y pensamientos automáticos ante diferentes situaciones;
- Tratar temas más complejos como la ansiedad, traumas, fobias, inseguridad patológica, depresión, problemas de pareja, duelos, relaciones de pareja tóxicas etc.
Síntomas para ir al psicólogo
Aquí encontrarás algunas de las causas por las que ir a terapia:
1. Notas, sin causa médica aparente, problemas digestivos, cansancio, dolores de cabeza, insomnio... Muchos problemas emocionales se manifiestan en nuestro cuerpo de forma física.
2. Te cuesta concentrarte en tus actividades diarias, te falta motivación, tienes bloqueos... el malestar continuado acaba reflejándose en nuestras actividades cotidianas.
3. Apatía, incapaz de disfrutar de situaciones que antes te resultaban agradables como hobbies o quedar con tus amistades.
4. Irritabilidad, vacío, sentimiento de soledad, inseguridad, bajo nivel de autoestima, ansiedad, problemas con la alimentación, ecoansiedad... Los cambios de humor y de ánimo son normales en el ser humano, el problema se genera cuando la frecuencia y la intensidad son altas.
5. Las relaciones sociales se han deteriorado o bien se han vuelto relaciones tóxicas, de dependencia, tienes problemas de pareja... son causas para ir al psicólogo.
6. Has vivido alguna experiencia traumática como el maltrato, acoso... son experiencias que dejan huella y acudir a un psicólogo ayuda a lidiar mejor con el proceso de recuperación.
7. Crisis existencial que te impide ver con claridad el futuro, tus metas, saber qué camino tomar…
8. Durante un proceso de duelo es normal sentirse mal y lleva un tiempo recuperarse, pero si sientes que te has quedado atrapado en un duelo prolongado, puede ser motivo para ir a terapia, quizás estés pasando por una depresión reactiva.
9. Miedos irracionales, diferentes tipos de fobias que impiden llevar una vida normal, cuando el miedo es tan excesivo, e incluso irracional, que te lleva a evitar aquello que lo produce.
10. Adicciones, dependencia o necesidad hacia una sustancia, actividad o relación.
Como ves, los motivos de cuándo acudir a un psicólogo pueden ser muy variados; todas las personas tenemos áreas en las que podemos mejorar y sentirnos mejor.
Si has llegado hasta aquí, probablemente es porque estás tomando la decisión de ir al psicólogo por primera vez y tienes muchas dudas respecto a cómo es ir a terapia, los beneficios de ir al psicólogo, cómo es la primera consulta y otras que, a continuación, tratamos de despejar.
¿Es bueno ir al psicólogo?
Cuidar de tu cuerpo es bueno, ¿verdad? por eso cuando tienes una dolencia acudes al médico. Entonces, ¿por qué dudar de si es bueno el cuidado de nuestra mente? Sí, ir al psicólogo es bueno. Además, como ya hemos dicho anteriormente, no es necesario tener un trastorno psicológico para hacerlo.
Las consultas están llenas de personas que buscan mejorar su calidad de vida con ayuda para superar la timidez, aumentar la autoestima, tener mayor control de las emociones, aprender a poner límites, recuperar la motivación, abandonar esa sensación de no saber qué te ocurre pero saber que algo no anda bien... La psicología no es solo para personas con problemas complicadísimos.
Pros y contras de ir al psicólogo
Estamos convencidos de que ir al psicólogo conlleva pros y es beneficioso. No obstante, sabemos que el estigma provoca reticencias y hace pensar en los contras de ir al psicólogo:
- El miedo a la intimidad, a mostrar tu interior y sentirte juzgado también, pero ¡error! Un psicólogo es un profesional que está para escuchar, no para juzgar.
- No tener la seguridad de cómo elegir un psicólogo, y no dar con el adecuado. Esa experiencia puede hacerte dudar de los beneficios de ir a terapia. Infórmate bien de qué profesionales tratan el problema que tú quieres, fíjate en su especialidad.
- Creer que acudir a terapia cuesta una fortuna. Es cierto que por la falta de recursos en la sanidad pública la mayoría de pacientes acaba recurriendo a la consulta privada, pero antes de desestimar la idea, infórmate del precio de un psicólogo. La mayoría de las veces, la primera consulta cognoscitiva es gratuita, y en ella puedes preguntar para tu problema cuántas sesiones pueden ser necesarias.
Como ya hemos avanzado, consideramos que la terapia tiene beneficios, y por eso a continuación profundizamos en ellos.
Las ventajas de ir a terapia
¿Por qué es importante ir al psicólogo? Algunas de las ventajas que obtendrás si decides ir a un psicólogo o psicóloga son:
1. Estabilidad mental y bienestar emocional
Aprenderás cómo funciona tu mente, adquirirás herramientas para controlar tus emociones, aumentará tu autoconocimiento, y eso te proporcionará equilibrio, estabilidad mental y bienestar emocional.
2. Despide a tus creencias limitantes
A veces, repetimos los mismos errores una y otra vez, estamos convencidos de que algo no es para nosotros, de que no somos capaces de esto o de aquello... y ¿sabes qué? Durante la infancia adquirimos unos patrones en los que podemos quedarnos atrapados y nos llevan erróneamente a todas esas creencias limitantes, incluso en casos extremos hay quienes acaban desarrollando querofobia, lo que significa miedo a ser feliz. La terapia es una oportunidad para cambiar, evolucionar y dejar atrás esos pensamientos limitadores.
3. Mejora las relaciones
Otra de las cosas para las que sirve ir al psicólogo es para mejorar la relación que tienes contigo mismo y también con los demás. Ayuda a mantener relaciones sanas y a mejorar vínculos.
4. Aumenta la autoestima y el autoconocimiento
Acudir al psicólogo hace que identifiques tus capacidades, cualidades, dificultades y debilidades y esto fomenta el autoconocimiento y hace que aprendas a quererte.
5. Proporciona recursos
¿En qué te ayuda un psicólogo? Pues en identificar tus habilidades y en construir tus propias herramientas para afrontar las situaciones para afrontar y manejar la adversidad.
¿Cómo es ir al psicólogo? ¿En qué consiste ir a terapia?
Ir al psicólogo implica un compromiso con uno mismo y tomar un papel activo en el proceso de la terapia. No se trata de ir a una consulta tumbarte sobre un diván (o sentarte delante del ordenador, en el caso de que optes por la terapia online y sus ventajas) y esperar a que el psicólogo o psicóloga adivine qué tienes.
Solo por ir a terapia tus problemas no van a desaparecer. Un profesional te dará herramientas, te orientará, pero eres tú quien tiene que recorrer el camino escogido.
Ir a terapia significa hablar abiertamente con tu psicólogo de aquellos temas que te llevaron hasta su consulta, así que si no sabes por dónde empezar, empieza por contarle qué te ha llevado hasta allí, en qué momento y por qué decidiste pedir cita.
Recuerda que una psicóloga o un psicólogo no están para juzgarte, así que por insignificante que te pueda parecer un tema no te lo calles, coméntalo. Deja también de lado la vergüenza. Se trata de establecer una relación de confianza y de que tú resuelvas aquello por lo que llegaste hasta la consulta.
Hay personas que deciden hacer anotaciones durante las sesiones, así que no extrañará al psicólogo, puedes hacerlo tranquilamente. Además puede, dependiendo del caso, que te encargue tareas, así que está bien tener a mano un bloc de notas.
Ir al psicólogo por primera vez
Cuando te duele una muela sabes más o menos lo que sucederá al llegar al dentista: dependiendo de cómo esté la pieza te harán un empaste o una endodoncia, pero cuando vas a ir al psicólogo por primera vez no tienes tan claro qué ocurrirá ni qué hacer en esa primera sesión de psicología. Es normal que te preguntes "¿cada cuánto ir al psicólogo?" o "¿cuánto tiempo durará el tratamiento?".
Por eso, a continuación te aclaramos todas las dudas que seguro te asaltan sobre cómo es ir al psicólogo por primera vez y qué tienes que saber antes de empezar.
Qué hacer en la primera cita con el psicólogo
En la primera sesión, realmente no vas a tener que hacer demasiado, aparte de comprometerte contigo mismo en este recorrido que acabas de iniciar.
El psicólogo te escuchará para determinar cuál es el motivo que te ha llevado hasta él y para clarificar cuales son tus objetivos.
Durante esta primera consulta el psicólogo no podrá darte un diagnóstico, pero sí su opinión profesional y podrá indicar aproximadamente el tiempo de terapia. En el caso de sufrir un problema psicológico que requiera de tratamiento valorará las distintas opciones.
¿Y además de hablar, qué más debes hacer? Preguntar todo lo que desees saber sobre la terapia y aclarar las dudas respecto a cómo se desarrollarán las sesiones, cuánto dura una sesión de psicólogo y afianzar tu compromiso con el recorrido que acabas de iniciar.
Cómo hablar con un psicólogo por primera vez
¿Qué decirle al psicólogo la primera vez? En realidad, no hay un guion establecido para saber de qué hablar con el psicólogo; simplemente, expón tu motivo de consulta y tus preocupaciones con naturalidad. Es importante la sinceridad, recuerda que no hay temas prohibidos, deja de lado la vergüenza. Estás delante de un profesional que está para ayudarte no para juzgarte.
Piensa que un psicólogo o psicóloga es consciente de la tensión que puede provocar el tocar ciertos temas, es lo habitual, y también forma parte de su trabajo el hacerte sentir bien y en una ambiente seguro y cómodo.
Lo importante es que vayas con el firme propósito de ser abierto y honesto contigo mismo y que te comprometas, solo así obtendrás resultados mejores y más rápidos.
Esperamos que este artículo te ayude a decidirte. Si buscas psicólogo online en Buencoco, puedes rellenar nuestro cuestionario y nos encargamos de buscar el más adecuado para tu caso.
